miércoles, 20 de octubre de 2010

DE MAR A MAR EN EUROPA Y TIRO PORQUE ME TOCA, 3.

Seguimos en Suiza, pero ahora en los Alpes. Y no en cualquier lugar de los Alpes, sino nada menos que en el lugar más alto al que se puede subir en Europa sin ser un aventurero, ya que hasta el Jungfrau (que traducido es algo así como "Doncella"), un pico de 4158 m, al que se puede subir con un tren de cremallera que cuesta unos 120 euros, y donde han habilitado una especie de mirador-centro comercial-museo. Es caro subir, pero merece la pena para ver desde arriba el increíble glaciar y sentirse muy muy pequeño (a no ser que seais más seguidores de los típicos prados alpinos con florecillas tipo Heidi, que entonces os puede decepcionar). Por mucho que donde se pilla el tren haga calorcito, hay que abrigarse, que en la cumbre cambia mucho el cuento. Unas gafas de sol tampoco vienen mal.
Tras bajar aun hubo tiempo para ver un pueblecito de la zona, donde casualmente estaban de celebración (que parecía bastante enfocada a turistas).
Es bueno visitar estos lugares con gente que ya los conoce, se aprende mucho más, además de que es todo mucho más fácil (Jose y Aca, muchas gracias!!!).


La zona, un paisaje idílico

A Cova (xeada) da Meiga, un palacio de hielo dentro de la montaña formaba parte de las atracciones turísticas en la cumbre, junto al mirador y el museo

El glaciar...

Las crestas de la parte alta del glaciar

Preciosa cascada en la zona, al pie de la cual se podía subir por un pasillo de roca (hasta se puede distinguir en la foto, casi al pie de la cascada, a la derecha).

Y en el pueblo estaban de celebración. Las tejedoras en primer plano, después los dos hombres que lanzaban las banderas al aire para recogerlas hábilmente, y al fondo los cuernos suizos de sonido ronco

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